Entre el arte y la conexión, surge MUERDE, un colectivo que celebra la creatividad y la unión con la naturaleza. La esencia de MUERDE reside en la fusión de sensaciones: el trinar de las aves se mezcla con un palpitar profundo, creando una sinfonía que invita a la reflexión y la creación.
La visión de MUERDE va más allá de lo convencional. Alena, Ignacio y el resto de la familia de artistas han logrado transformar su manera de ver el mundo en una invitación a compartir experiencias auténticas. La reconexión con uno mismo y con el entorno es fundamental en su filosofía, así como la ruptura de moldes que permite un reensamblaje creativo. En sus encuentros, los participantes no solo crean arte, sino que también descubren nuevas formas de expresión, enriqueciendo su vida y la de quienes los rodean. Esta dinámica se ve reflejada en talleres y exposiciones que fomentan un diálogo constante entre la naturaleza y la creatividad.
MUERDE no es solo un colectivo artístico; es un espacio donde las artes y las experiencias se comparten y se celebran. Alentar a las personas a dejarse llevar por su creatividad en un entorno tan inspirador como Concón es un regalo que vale la pena experimentar. Si estás buscando una forma diferente de conectarte con el arte y la naturaleza, no dudes en acercarte a MUERDE. Aquí, cada paso descalzo sobre las rocas se convierte en una oportunidad para crear y redescubrirse.
